Piel suave y delicada, anticolor, que garantiza su forma transpirable, absorbe la humedad y se seca rápidamente. Según los cambios en las reglas de la NBA que entraron en vigor en la temporada 1980-81: Los oficiales no permitirán que ningún jugador juegue con ningún tipo de joyería en la mano, el brazo, la cara, la nariz, la oreja, la cabeza o el cuello.. Tras su exitoso paso por el banquillo de Lakers en los ochenta, Pat Riley llegó en 1992 a los New York Knicks con la intención de llevar el título de nuevo a la Gran Manzana.